Comunicación médico paciente: Cuando las palabras también curan

Mi café de hoy 8 de marzo, es un pequeño homenaje a todas las mujeres, las que están y las que nos han dejado y para esta ocasión he elegido a una invitada de lujo: la Doctora Mercedes Herrero ¡gracias por cuidarnos y enseñarnos!

Cuando estaba embarazada de pocos días de mi hijo Álvaro, el ginecólogo que me empezó a atender no me gustaba demasiado. Malena, una íntima amiga de mi hermana, me recomendó a su ginecóloga diciéndome; “Es un cielo, además de profesional y cercana”

Desde el primer momento que vi a la Dra. Herrero, parecía que la conocía de toda la vida. Es de esas personas que te lo pone fácil, todas tus angustias se disipan con sus explicaciones cercanas y didácticas y lo que es mejor, su calidad humana, ternura y gran sentido del humor, quedan patentes desde el minuto uno. Ha sido un auténtico placer compartir con ella mis dos embarazos y seguir compartiendo mis revisiones anuales.

Lo que más me gusta de cada consulta y visita es que además de hablar de todas las dudas y miedos que puedas tener, hablas de la vida, de mil cosas… Es asombroso que, después de 18 años, se siga acordando de todos los detalles que le cuentas, por muy pequeños e insignificantes que sean. Te pregunta por cómo sigue aquél familiar de su enfermedad que el año anterior estabas preocupada, por ese detalle que le hayas comentado de tus hijos, por esa novedad de negocio que has incorporado a tu empresa, o por aquello que ni tu recordabas le hubieras comentado. Y así, año tras año. Lo más sorprendente es que no lo tiene escrito en ningún sitio, ¡tiene una memoria impresionante! Te conoce por tu nombre y apellidos y se preocupa de todo lo que te pueda interesar o preocupar como ser humano.

Todos estos años mi hermana Rosa y yo hemos acudido, en primer lugar, a realizarnos todas las pruebas y posteriormente a la consulta para obtener los resultados. En los comienzos, una vez nos dijera Mercedes que todo estaba bien, al salir de la consulta Rosa y yo nos íbamos a celebrarlo.

En el año 2012 cuando asistí a la 2ª edición de Madrid Woman’s Week, en una sesión dedicada a la salud femenina, sin saberlo, apareció la Dra. Herrero como ponente, comenzando su ponencia diciendo: “Una de cada 8 mujeres desarrollará un cáncer de mama en algún momento de su vida” y añadía; “Hoy por hoy un 85% de los casos se curan. Es fundamental e importantísimo el diagnostico cuanto antes y para ello, es imprescindible las revisiones periódicas”

Desde ese preciso momento y después de haber perdido a alguna amiga, Rosa y yo no esperamos a que nos den los resultados para celebrarlo. Ahora, el mismo día que nos hacemos las pruebas, celebramos el tenernos la una a la otra y lo afortunadas que somos por poder celebrar simplemente la Vida.

Gracias Mercedes por todos estos años de cuidarnos tan bien. Es un placer seguir teniendo cada año esta cita contigo, cargada de cariño y gran sentido del humor. Siempre cuando nos ve entrar nos dice; “Ya están aquí “Las súper hermanas” ¡qué alegría veros!”

La Dra. Herrero, además, es de esas personas curiosas a las que le gusta informarse de todo, es inquieta, proactiva y empática, siempre dispuesta a todas las iniciativas que tienen como objetivo el de concienciar a la mujer de que de un cáncer también se sale.

El pasado año me comentó que también estaba muy preocupada con las estadísticas del aumento de enfermedades de transmisión sexual, embarazos no deseados y la desinformación sexual que existe en la sociedad, sobre todo, entre los más jóvenes y vulnerables. Era una paradoja comprobar como en la era de la información (la tenemos en la mano al segundo) y del internet de las cosas, existe una desinformación total. Hacía hincapié en el retroceso en muchísimos aspectos ya conseguidos y resaltaba datos muy alarmantes, como  la manipulación y la falta de rigor científico y veraz que existe en la red.

Toda esa preocupación le ha llevado a crear un proyecto de divulgación junto a otros profesionales llamado www.saludsexualparatodos.es (en los próximos días harán su presentación oficial). En mi opinión, lejos de nuestras creencias y religiones, es fundamental estar informados para poder educar mejor a nuestros hijos y, por ende, construir una sociedad más informada, más respetuosa, más justa y mejor para tod@s.

Mil gracias Mercedes por tu compromiso, tu generosidad y por querer tomarte un café conmigo. Te deseo muchos éxitos en tu nuevo proyecto y como ya sabes, todo mi apoyo. ¡Nos vemos en tu consulta!

Comunicación médico paciente:

Cuando las palabras también curan.

Compartir este café con Alicia el día 8 de marzo es muy importante para mí. Siempre hubo mucha afinidad entre Rosa, Alicia y yo misma. Ellas, mujeres sensatas y de valores, son el tipo de pacientes preferidas por cualquier médico. Conocer el espacio de trabajo de Alicia Gracia  (byperson), donde se gestiona la vida laboral de tantas personas fue muy interesante. Sin duda esa actividad hay que hacerla desde los valores si quieres que sea duradera.

Como médico al cuidado de la salud de las mujeres no podíamos haber elegido mejor fecha el Dia Internacional de la Mujer, además, se cumplen 6 años de aquel encuentro fortuito con Alicia en la charla del Madrid Woman’s Week, rápidamente la identifiqué entre el público asistente. Tengo la suerte de atender a mis pacientes a lo largo de los años y establecer con ellas un auténtico vínculo médico-paciente. Ya estoy atendiendo en consulta a las primeras niñas que ayudé a nacer, cosa de los años…

Esa ponencia fue muy importante para mí, me invitaron a hablar de prevención del cáncer en las mujeres en un entorno diferente, fuera de mi hospital, donde había participado en diferentes jornadas de divulgación para pacientes. La experiencia fue tan enriquecedora que intento participar en todos los eventos de divulgación que puedo. Reconozco que me gusta mucho el contacto con las personas, cuando alguien me dice que le gustaría ser médico es lo primero que le pregunto, ¿te gustan las personas y el trato con ellas?, si dudan, les desanimo.

Los médicos estudiamos y sabemos bastante de lo nuestro, pero no siempre sabemos explicarnos para que nuestros pacientes nos entiendan. Esto es un problema y un defecto de nuestra formación que vamos soslayando con ganas y experiencia. La comunicación eficaz es una parte muy importante de nuestro trabajo. No se trata solo de ser simpático, dulce, amable, sino de establecer una comunicación real. Todos los elementos de la misma: emisor, receptor y mensaje han de funcionar. Además, en el caso de la relación médico-paciente ha de ser bidireccional. Aunque el esfuerzo es mutuo, nosotros como profesionales, debemos dirigir nuestra entrevista permitiendo que los pacientes se expliquen, para después hacerlo nosotros. Hay una última fase que se olvida con frecuencia, comprobar qué es lo que ha entendido el paciente. Esa parte olvidada es la responsable de la eficacia de los tratamientos, que si no son entendidos y admitidos difícilmente se cumplirán.

Siempre le digo a mis pacientes que me precio de hablar claro y de que se me entienda, pero que si no tengo un buen día pregunten. Esto es importante tanto en la salud como en la enfermedad.

Los ginecólogos tratamos a las mujeres a lo largo de toda su vida, somos sus médicos de cabecera en no pocas ocasiones. En las mujeres sanas hay que formar en hábitos saludables, prevención de enfermedades, anticoncepción. Qué decir del embarazo, tan importante cuidarse desde antes del mismo para prevenir enfermedades que puedan afectar al feto. Desterrar miedos y mitos hacia el parto y crianza y cuidar el momento de la asistencia del parto como uno de los momentos más importantes de la vida de cualquiera. En la enfermedad hay que ofrecer el soporte técnico y emocional que cada paciente necesita, en mi caso, la mayoría de las pacientes enfermas que atiendo padecen cáncer de mama. Asistirlas ha sido un privilegio que me ha brindado mi profesión. Cada día me enseñan cosas nuevas, me llegan al corazón, esto me ayuda a intentar hacerlo mejor. Esta sensación también me la confirman mis residentes, todas me confesaron que empezaron la rotación por mama con cierta aprensión. Tras pasar un día de consulta especializada salían renovadas.

La comunicación de malas noticias es un tema aparte. No me enseñaron en la facultad más allá de lo que aprendí por observación en las prácticas. Es lo más difícil de la profesión. Solo he encontrado una forma de hacerlo, siendo honesta al máximo y explicando las limitaciones que tenemos. Siempre que doy una mala noticia me adelanto a sus pensamientos con una pregunta del tipo: ¿pero por qué a mí, habré hecho algo malo?, si no das pie no se atreven a preguntarlo.

En el último año, tras haber obtenido el título de Doctor, he vuelto a trabajar en divulgación. Ahora dirijo los esfuerzos hacia la divulgación en salud sexual. Mi vida profesional ha ido a la par del desarrollo de internet, pensé que el acceso a la información promovería un conocimiento en salud para toda la población. La sorpresa ha sido que el conocimiento en otras áreas tecnológicas no ha ido pareja con el de la salud. Más aún, mitos y bulos que creíamos desterrados hace tiempo reaparecen y son difundidos con intensidad viral. Esto genera confusión con el consiguiente peligro para la salud. La única vacuna eficaz para esos mensajes virales es la formación, educación al fin.

De nuevo los médicos como promotores de salud y conocedores de la materia tenemos una responsabilidad social. Pero hemos de cuidar la forma de comunicar. Ha de ser de forma tan rigurosa como clara. De esta inquietud nace www.saludsexualparatodos.es.

Quiero agradecer el impulso que recibo de mis pacientes y en especial de Alicia Gracia que se ha implicado haciendo suyo el proyecto, y así es, como reza el nombre es para todos.

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